Otra vez llegaron las vacaciones, muy anheladas para casi todos, pero con ellas llegan también los planes y todos los factores que debemos tener en cuenta para lograr unas muy divertidas. La oferta de turismo dirigido a familias es bastante amplia pero muchas veces puede estar fuera de nuestro presupuesto. Por eso, para esos momentos en que no llegan ni las ideas 💡 ni el dinero 💵 te compartimos esta lista de planes que puedes hacer en familia con muy poco o nada de presupuesto:
Un picnic en el parque puede ser una excelente forma de compartir en familia y divertirse sin gastar mucho dinero. Los niños pueden participar en su planeación eligiendo la comida que quieren llevar, ayudando a hacer la lista de lo que debemos empacar y sugiriendo las actividades que les gustaría realizar. De esta manera se sentirán incluidos en todo el proceso, lo cual fortalecerá su autoestima y les brindará una sensación de satisfacción al sentirse útiles.
Preparar una receta sencilla y divertida con todos los miembros de la familia es una actividad en la que todos pueden estar involucrados con tareas que vayan de acuerdo a su edad. Los niños no sólo disfrutarán consumiendo los alimentos sino todo lo que implica su preparación. Esta actividad ofrece una gran cantidad de beneficios: les permitirá estrechar sus lazos familiares, trabajar la motricidad fina y la estimulación sensorial al realizar ciertas tareas como lavar las frutas y verduras, seleccionar las frutas según su color y textura, pasar alimentos de un recipiente a otro, mezclar y batir, decorar galletas y pasteles, entre muchas otras. Adicionalmente, es una forma de conocer otros alimentos y al participar de su preparación, aumentar su interés en probarlos.
Explorar los caminos rurales cercanos a nuestra ciudad para dar un paseo rodeado de naturaleza puede ser exactamente lo que necesitamos para desconectarnos, relajarnos y compartir un buen momento en familia. Una emocionante aventura para los chiquitos y una oportunidad de respirar aire puro para todos. Hacer de este plan una ocasión para aprender y disfrutar mucho más, no es nada difícil. Por ejemplo, una buena idea sería preparar una búsqueda del tesoro. Para ello basta con realizar una lista de diferentes elementos que sabemos que se pueden encontrar fácilmente en el camino (flores, árboles, lugares como tiendas, cruces de caminos, puentes, etc.).
Revisar la programación de eventos en bibliotecas y centros culturales de la ciudad (la mayoría de las veces son gratuitos). Hoy en día podemos encontrar una gran oferta de eventos culturales apropiados para toda la familia tanto de forma virtual como presencial. Shows de títeres, obras de teatro, lecturas en voz alta, eventos musicales y muchos más.
Aprovechar los eventos promocionales de marcas o tiendas dirigidas al público infantil. Muchos de ellos realizan actividades gratuitas que involucren sus productos. Así, se pueden aprovechar talleres de pintura, dibujo, plastilina, entre muchas otras manualidades. Para esto es una buena idea, seguir las cuentas en redes sociales de marcas de materiales artísticos y afines, así como estar atentos a la programación de los centros comerciales los cuales ofrecen este tipo de eventos principalmente en vacaciones. Ciertamente las posibilidades son infinitas. Es cuestión de ser creativos y arriesgarnos a probar nuevas experiencias. Recuerda que los recuerdos que atesoramos no tienen que ver con cuanto tiempo ni dinero invertimos sino cuanto los disfrutamos. . ¿Qué te parecen estas ideas? ¿Harías o has hecho alguna de ellas? ¿Cuáles agregarías a la lista?
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